Ya pasó el tiempo en el que Argentina podía vanagloriarse de ser un país con baja desigualdad. Hoy, la diferencia entre ricos y pobres es tan grande que en un extremo hay gente que no puede comer y en el otro personas que pueden gastar el equivalente a 5 Asignaciones Universales por Hijo en mantener a sus mascotas. Para ser claros: los hijos de la personas en el acampe de la 9 de Julio se alimentan, educan e higienizan con $6.374 al mes, mientras que una bolsa de balanceado puede costar $8.000. Mirá el video.