De qué depende que se extienda la suspensión de las clases. Cuáles son los posibles escenarios y en qué se está trabajando para garantizar el acceso a la educación. Mirá la entrevista exclusiva con Nicolás Trotta.

Motores en marcha

Los semblantes de quienes están poniéndole el cuerpo a la crisis mundial lo dicen todo: están agotados y desbordados. Nicolás Trotta, ministro de Educación de la Nación, no es la excepción. Desde antes de la medida suspensiva ya estaba instalada la preocupación y se trabajaba en planes de emergencia.

La suspensión de clases estuvo acompañada por la inauguración de un portal educativo para intentar minimizar el impacto en la educación. El portal es de navegabilidad gratuita gracias a la colaboración de las empresas de telefonía móvil que proveen conexión a internet.

A la vez, se lanzaron dos programas de televisión en TV Pública y Paka-Paka. Los programas están destinados a todos los niveles educativos y se transmiten de 9 a 11 y de 14 a 16.

“No estamos en vacaciones. Los maestros están trabajando en vínculo con los estudiantes. Lo están haciendo los chicos y también lo estamos haciendo los padres”, Nicolás Trotta.

Durante la semana pasada, y sólo en el portal de internet, se contaron 1.400.000 visitas, prueba de que las herramientas están en marcha y siendo utilizadas.

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Prepararse para todo

Según el ministro, el presidente pidió que se elaboren estrategias para cualquiera de los posibles escenarios.

Si bien se habla de suspender las vacaciones de julio o de adelantar el comienzo del próximo año lectivo al mes de enero, Trotta deja en claro que es imposible anticipar cuáles serán las próximas medidas a tomar ni qué se hará para intentar subsanar el déficit inevitable.

Las decisiones se harán en función de un balance entre las prioridades inminentes de la salud y la educación.

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Ampliar la perspectiva

Los saberes tienen que estar garantizados, pero la trayectoria educativa total de un estudiante permitiría cierta flexibilidad a lo largo del tiempo, de manera que en el presente se pueda priorizar la salud de toda la sociedad argentina.

“Hay cuestiones que nos vamos a tener que animar a resolver en el 2021”, Nicolás Trotta.

Según el ministro, es necesario reconocer que algunas cuestiones no van a poder resolverse durante este año lectivo. Con un buen plan educativo, perder algunos meses de asistencia a las aulas no debería ser catastrófico.

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Función social en el siglo XXI

La educación pública cumple un rol fundamental en la sociedad: equiparar oportunidades. En un país cuyo contexto está marcado por la creciente desigualdad, Trotta no quiere perder de vista ese objetivo. Por el contrario, es a partir de esa funcionalidad estructural que pretende abordar el problema que se presenta.

Es ahí donde ingresan estratégicamente las herramientas que se han implementado hasta ahora a través de instrumentos que garantizan, en la mayor medida posible, el acceso a la información: televisión, radio e internet.

“En esta situación de excepcionalidad, sabiendo que la escuela es irremplazable, tenemos que lograr que no se profundice la desigualdad”, Nicolás Trotta.

El ministro de Educación anticipa que se está trabajando en la producción de 7 programas audiovisuales diseñados para grupos de niveles escolares que significarían 14 horas de televisión diarias.

Si el regreso a las clases se posterga, como hasta ahora todo parece indicar, esto comenzaría la semana que viene.