Se robaron 27 viviendas, una plaza y un vacunatorio
El intendente de Río Segundo, Darío Chesta, recibió cientos de millones de pesos del gobierno nacional y provincial para construir 27 viviendas, un vacunatorio y realizar la remodelación de la plaza Sarmiento. Las viviendas son cuatro paredes en un barrio fantasma, el vacunatorio ni siquiera es un cascarón y la plaza es una ruina. La plata estuvo, pero las obras no están.
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El intendente que entregó las viviendas antes de hacerlas
Darío Chesta es el intendente de Río Segundo, localidad que cuenta con 22 mil habitantes y está ubicada en la provincia de Córdoba.
En el año 2021, durante la gestión del presidente Alberto Fernández, firmó un convenio donde el gobierno Nacional se comprometía a proveer los fondos para realizar 21 viviendas en barrio Las Flores de la localidad Río Segundo.
Esto se realizó en el marco del anuncio del gobierno de Fernández para brindar una “solución habitacional” de 264.000 viviendas durante el período 2021-2023 en todo el país.
El intendente realizó un acto donde se adjudicaban las casas por sorteo y se realizaba la “entrega de llaves” a los beneficiarios. Esto decía Chesta:
“Le vamos a poder cumplir el sueño a 20 familias en los próximos días. Ya se hizo el sorteo, ya están adjudicadas las casas y vamos a comenzar con la construcción de 20 viviendas”.
Tal vez entusiasmado por el acto de entrega y adjudicación o por vaya a saber por qué otro factor, el gobierno Nacional decide realizar el aporte para construir seis viviendas más.
El monto entregado en la primera parte del convenio para las 20 viviendas fue de 107 millones de pesos. Actualizados por el índice de inflación, 1.858 millones de pesos.
La segunda entrega se realiza por 30 millones de pesos, el equivalente actual a 530 mil millones de pesos.
Las casas comenzaron a construirse y el intendente se encargó de enviar por Facebook, videítos de los adelantos de obra a Nación. Hasta que no hubo más. Lo grave es que el gobierno Nacional nunca supervisó ni reclamó absolutamente nada. La obra quedó absolutamente a la deriva.
Las obras se detuvieron. Solo existe el cascarón. Cuatro paredes de ladrillos.
Así se encuentran las 27 viviendas prometidas.
El plazo indicado en el convenio para la construcción era de 12 meses.
Para cada una de estas viviendas, el gobierno destinó 73 mil dólares. Una locura que al menos se hubiera justificado si hoy 27 familias tuvieran su vivienda propia. Pero solo existe un proyecto de barrio en ruinas.
El costo de estas viviendas equivale a lo que cuesta un departamento en el barrio de Recoleta en Capital Federal. No existe relación. No existen escrúpulos para un robo tan descarado.
El intendente se “robó” la plata de 27 casas que anunció con bombos y platillos en un acto donde las familias, emocionadas recibían la llave de lo que sería su primera vivienda propia.
Hoy la construcción está completamente parada y se ha enviado a cerrar puertas y ventanas con ladrillos porque no se va a continuar con las obras y algunas casas ya han sido usurpadas.
Estamos frente a un delito flagrante y administración fraudulenta y debería ser la justicia Federal quien investigue el uso y la desaparición de los fondos ya que fue entregado por el Gobierno Nacional.
Curros a la carta
Hoy los habitantes de la localidad están indignados, pero no solo con quien les robó la ilusión y la plata en la cara de manera directa; también con quien entregó los fondos y no controló absolutamente nada.
El monto total transferido fue de 2.389 millones de pesos. ¿Dónde está esa plata?
¿Cómo se le explica esto a la gente?
El intendente que vacunó a todos
En la misma localidad, con los mismos actores, se firma un convenio en mayo de 2022 para “Ampliar y/o refaccionar el Centro de Salud” de la localidad de Río Segundo. El ministerio de Salud se compromete a financiar por un monto de 5 millones de pesos (hoy 50 millones de pesos) la construcción de un vacunatorio. El convenio es firmado por el intendente Darío Chesta.
Así se encuentra hoy el vacunatorio. No se han terminado de levantar las cuatro paredes.
Pero no faltó la propaganda. El intendente es experto en dar buenas noticias.
Se anunció que en Río Segundo, a través de los fondos del “Pacto Sanitario”, se construirá un nuevo vacunatorio con entrada independiente, sala de espera, recepción, pantallas led, dos puestos vacunatorios, equipamiento completo, consultorio de vacunación pediátrica, dos sanitarios y sector de almacenamiento.
Además de la primera entrega, el gobierno local, recibió una segunda partida para el mismo vacunatorio por parte del gobierno de la provincia de Córdoba en abril de 2025 por un monto de 50 millones de pesos para “finalizar” la construcción.
El monto total recibido para la construcción del vacunatorio es de 100 millones de pesos.
Entonces; no solo no controlan la ejecución de las obras, si no que le siguen dando plata al intendente Darío Chesta.
La plaza
La plaza del pueblo estaba en buenas condiciones, pero “alguien” decidió que necesitaban generar obras ¿para currar de algún lado?
En la página de la municipalidad de Río Segundo se anuncia que el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora habilitó obras y anunció más inversiones en infraestructura. Fechado el 27 de febrero de 2024.
Entre las obras anunció el aporte de 50 millones de pesos para el comienzo de la remodelación y modernización de la Plaza Sarmiento.
En abril de este año, nuevamente el gobierno provincial anuncia la entrega de 200 millones de pesos más para la remodelación de la “plaza central” del pueblo.
En total: 250 millones de pesos.
El Sr. intendente se carga la “supervisión” de la obra y así se encuentra hoy la plaza. Un estado de abandono total.
Claro, los vecinos reclaman:
“¡¡¡365 días… y la plaza todavía no está lista!!! ¿Hasta cuándo vamos a esperar?"
El intendente utiliza el mismo “modus operandi”, graba videítos de la supuesta remodelación y se los envía a quienes lo supervisarían.
La plaza recibió un total de 250 millones de pesos para la remodelación. Pero no hay plaza, ni plata ni remodelación.
Esto se llama robarles a los pobres. La plata la ponemos todos los contribuyentes para obras que se cobran, pero no se ven. Todos delitos contemplados en el código penal y seguimos esperando que en al menos en uno de estos casos la justicia actúe.
¿Todo es curro? ¿Todo es mentira? ¿Cómo hacemos los laburantes para entender la realidad?
Podés hacer tu denuncia en los teléfonos: 1153434944 - 1144943871