Siempre que la derecha hable de inflación, te va a echar la culpa a vos. Y lo hacen por una razón básica: porque la principal causa de la suba de precios no sos vos, ni los sueldos, ni las paritarias. La principal causa es la evasión.

Te van a decir que es por la emisión. O te van a decir que es por los planes. O te van a decir que es por las 30 cuotas para fomentar el consumo. O incluso te van a decir que es por las paritarias. ¡O sea, que la inflación es culpa tuya!

Lo que nunca te van a decir los dirigentes y sobre todos los economistas de la derecha, es la verdadera y más dañina causal de la inflación. Y estoy seguro de que nunca habías oído hablar antes de esto. Por eso prestá atención:

La principal causa de la inflación es la evasión.

No, no estoy jodiendo. Así como lo leés. 

Los que evaden, los que esquivan el impuesto, los que venden y sobre todos los que exportan en negro, esos pícaros son los que te destruyen a vos el salario.

El autor de la teoría que pone a la evasión como una de las primeras causales de la inflación es el economista norteamericano L. Randall Wray.

Su marco teórico es el que sirvió de base para una publicación del CELAG (Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica), que ya desde el título pone las cosas con bastante claridad: "La culpable de la inflación es la evasión". Ese es el encabezado del trabajo firmado por el economista argentino Guillermo Oglietti, doctor en economía aplicada y subdirector ejecutivo del organismo.

El motivo de la inflación (que la derecha nunca te va a contar)

ADÓNDE ESTÁ LA TRAMPA

Una teoría de esta naturaleza sin dudas dejaría descolocado al promotor de los créditos UVA, columnista del canal de Macri y ahora candidato a diputado. Sí, Martín Tetaz, el hombre que con toda su verborragia asegura tener la solución para la inflación, y es simplemente ponerle un candado al Banco Central para que no intervenga más en la economía.

Tetaz, en una de sus habituales y sistemáticas pifias, asegura que la solución es frenar a cero la emisión de dinero. Lo que no dice el candidato del canal de Macri es que eso fue exactamente lo que hicieron Guido Sandleris y Nicolás Dujovne. Frenaron a cero la emisión y lograron un discreto 53,8%, la mayor en los últimos 38 años. Un detalle.

Lógicamente, ni Tetaz, ni Dujovne, ni Sandleris, ni mucho menos Macri, te van a decir la importantísima gravitación que tienen los evasores en la generación de inflación, algo que sí explica y con claridad el paper de Celag.

¿Pero por qué la evasión provocaría inflación? La explicación la da el propio Oglietti en su publicación. Prestá atención.

EL CIRCUITO DEL DINERO

"El dinero vale porque alguien lo acepta como medio de pago. ¿Por qué alguien aceptaría que le paguen con un papelito de color?", se pregunta. La respuesta es casi obvia: la gente recibe ese "papelito" simplemente "porque el Estado lo recibe para cobrar impuestos". Es decir, según Oglietti, "el Estado crea dinero en uno de los extremos, y en el otro, lo destruye recaudando".

Hasta ahí todo bien. El problema es que, cuanto menos recaude, menor valor tendrá ese dinero. Y ahí empiezan los inconvenientes.

"Ese dinero que emite el gobierno, es necesario que luego sea absorbido por el sistema, es decir, aceptado; y que luego fluya de regreso para que la gente con ese dinero pague los tributos", razona. 

Ahora bien: ¿Qué pasa cuando ese dinero que colocó en el mercado nunca logra regresar, sencillamente porque no se pagan los impuestos?

Ahí empieza el problema. Creeme, Tetaz...

"Cuando no se cobran los impuestos que se deberían recaudar, lo que sucede es que ese dinero deja se ‘destruirse’ y genera un incremento en la masa monetaria", cuenta el especialista en diálogo con ADNWEB. Y cierra el pensamiento con una pregunta que en realidad es una respuesta: "Y si hay cada vez más masa monetaria, en un país como el nuestro, ¿adónde va?".

ESE DINERO VA A LA FUGA. Obvio.

Y ahí tenemos dos problemas. Un exceso de circulante que el Estado no absorbe, lo que genera un escenario para que ese dinero ya de por sí valga menos. Pero detrás de eso, un problema mayor: ese dinero que no es reabsorbido por el Estado va en busca de moneda dura. Sí, dólares. 

EMPRESAS NOCIVAS

"El grueso de la evasión proviene de las estrategias de las grandes empresas y multinacionales para transferir ganancias a jurisdicciones con nula presión fiscal", sostiene Oglietti, señalando que en nuestro país, "las prácticas fiscales nocivas de las multinacionales (sobre todo grandes cerealeras) se elevan a una cifra de 21 mil millones de dólares anuales (un 4,4% del PIB)".

El trabajo del economista considera a Venezuela, México, Argentina y Brasil como los "campeones latinoamericanos en evasión". En caso argentino, los 394 miles de millones de dólares en los que está estimada la evasión desde 1979 hasta 2014, representan el 128% de la deuda externa del país. Por eso Oglietti sostiene sin espacios para la duda: "Sin evasión, no habría deuda". 

El motivo de la inflación (que la derecha nunca te va a contar)

De hecho, la evasión total actualizada hasta 2020 se aproximaría al medio billón de dólares, "unas diez veces el valor en dólares de la cantidad de dinero existente en la economía, que en marzo de ese año equivalía a unos 51 mil millones de dólares".

Pero hay más. Lamentablemente hay más. Porque justamente el Estado, al sufrir la sangría de la evasión, no puede generar nuevo circulante que podría terminar "contribuyendo a crear más crédito y riqueza". Esto significa que la economía se queda sin un impulso fundamental.

Y hay todavía más. Como no puede cobrar por vía de impuestos, muchas veces el Estado Argentino emite títulos o bonos a tasas formidables, para quitarle también presión al dólar. Pero entonces, el dinero que los evasores deberían haber pagado como impuestos, terminan en realidad cobrándoselo al Estado en intereses jugosos por esos títulos.

“Evasión, fuga, deuda e inflación” termina siendo un ciclo de empobrecimiento de los trabajadores y enriquecimiento de quienes evaden. Por eso el economista considera a la evasión como una "lluvia de inversiones al revés, de abajo para arriba".

¿Quedó claro, no? Entonces ahora, cuando escuches a alguien decir que tiene la receta para resolver “el temita” de la inflación, cuando te digan que es lo más fácil de corregir, cuando te digan “en mi gestión la inflación no va a ser un problema”, preguntate en serio, pero bien en serio, cuáles son los planes que tienen para reducir la evasión. Pero la evasión en serio, ¿eh? 

Si el plan pasa por ahí, entonces creeles. Pero si ni siquiera mencionan el tema, mejor alejate de esos vendehumo. Porque claramente te quieren cagar.